Creación y evolución histórica

En 1988, una nueva era se abrió para la protección de la infancia y la adolescencia en Uruguay. La Ley N° 15977 marcó un hito al modificar la denominación y la estructura del Consejo del Niño, que pasó a llamarse Instituto Nacional del Menor (INAME). Esta transformación buscaba fortalecer la atención y protección de los niños, niñas y adolescentes del país.

El INAME asumió la función de ejecutar las medidas judiciales dispuestas para adolescentes infractores, tarea que se había iniciado años atrás por el Consejo del Niño. Esta responsabilidad implicaba un gran desafío: brindar a los jóvenes en conflicto con la ley penal la oportunidad de rehabilitarse y reintegrarse a la sociedad.

En el año 2004, un nuevo capítulo se escribió en la historia de la protección de la infancia y la adolescencia con la aprobación del Código de la Niñez y la Adolescencia. Este código marcó un cambio radical en la concepción de la infancia, reconociendo a los niños, niñas y adolescentes como sujetos de derechos.

Con la entrada en vigor del Código, el INAME pasó a denominarse Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU). Esta nueva denominación reflejaba el enfoque integral que se buscaba dar a la atención de la infancia y la adolescencia.

Dentro del INAU, la división encargada de las medidas socioeducativas para adolescentes infractores ha tenido diversas denominaciones a lo largo de los años. Entre ellas se encuentran INTERJ y SEMEJI.

En 2011, se creó un órgano desconcentrado dentro del INAU llamado SIRPA (Sistema de Responsabilidad Penal Adolescente). Este sistema buscaba fortalecer la atención y el seguimiento de los adolescentes que cumplían medidas socioeducativas.

Finalmente, a fines de 2015, se aprobó la creación del Instituto Nacional de Inclusión Social Adolescente (Inisa) como Servicio Descentralizado. Inisa asumió la competencia de ejecutar las medidas judiciales dispuestas por encontrar al adolescente responsable de la comisión de infracciones a la ley penal.

La creación de Inisa marcó un nuevo paso en la evolución de la protección de la infancia y la adolescencia en Uruguay. Este nuevo organismo buscaba brindar a los adolescentes en conflicto con la ley penal una atención especializada y personalizada, con el objetivo de promover su reintegración social y evitar la reincidencia delictiva.

Ley N.º 19367 Creación del Instituto Nacional de Inclusión Social Adolescente como Servicio Descentralizado

Capítulo I Naturaleza Jurídica, Personería y Domicilio
Capítulo II De los cometidos principales del Inisa
Capítulo III De la dirección y la administración
Capítulo IV Del Consejo Honorario Nacional Consultivo
Capítulo V De los Recursos Humanos
CapítuloVI Patrimonio, Recursos y Presupuesto
Capítulo VII Disposiciones Transitorias